...De regreso de un país arrodillado y que sin embargo lucha cada día para no rendirse a una situación de degradación y desamparo. En un país donde impera el vacío institucional y donde las ayudas tienen problemas a alcanzar la población, hay gente que trabaja duro para promover un movimiento de liberación desde abajo... desde aquel mundo campesino que siempre se queda aplastado y olvidado por la sociedad que "cuenta". De estos días muy fuertes, sobre todo emocionalmente, queda el recuerdo de una persona que pertenece a los santos anónimos, aquellos ángeles que en el día a día marcan la diferencia, y que sin embargo no hacen noticia. Dadoue (Elane Printemps) trabajó en comunidades de montaña de Haití en la alfabetización y formación profesional de los campesinos, para que esas personas pudieran tener alternativas a la miseria negra que los tiene atados.
En la comunidad de Dofiné estableció una escuela, a partir de la cual surgió la organización FDDPA (Fos pou Defann Dwa Peyzan Ayisyen - Fuerza para Defender los Derechos de los Campesinos Haitianos), que poco a poco, a pesar de la escasez de los medios y la violencia generalizada, se está afirmando cada vez más en el país como red basada en la solidaridad y el mutuo apoyo.

Veía la formación como el elemento esencial para que los campesinos pudieran revendicar y reclamar sus derechos y luchar para un cambio total orientado a desarrollar una sociedad fundamentada en la justicia, donde todas las personas sean personas. Estaba plenamente conciente de que, para solucionar los problemas que afectan a la gran mayoría de la población mundial, se necesita promover un sistema donde es la base que toma las decisiones y decide por su modelo de desarrollo, y así justifica la existencia de las instituciones de coordinación. Estaba fuertemente convencida de la necesidad de generar un progresivo empoderamiento de la base, de las personas que viven el territorio y pueden por esto tomar las decisiones más apropiadas relativamente a eso.

Dadoue decía: "Yo no estaré en silencio, tolerando cualquier cosa, a pesar de me quieran matar - Si un día yo no estubiera, hay otros que seguirán [...] Mi vida es prestada"... Palabras proféticas... Dadoue no está con nosotros... por lo menos físicamente: el 24 de abril de 2010 fue asesinada mientras prestaba su servicio en Citè Soleil (Port-ou-Prince).

Creo que la historia sea una sucesión de mártires, llorados ipócritamente por muchos, entendidos por pocos, seguidos por poquísimos. De vez en cuando, aparecen en la escena del mundo unos astros luminosos, que meten en discusión ellos mismos y con ellos mismos el sistema donde son insertados, volviéndos inevitablementes incómodos. En formas y contextos diferentes, siempre hay alguien que va más allá del simple vivr para comer, creiendo firmemente que hay algo grande detrás de cada existencia, cuyo significato profundo desaparece detrás de la búsqueda del puro bienestar material propio de la loca carrera materialista y consumista.

Martin Luther King decía: "Llega un momento en la vida en que se necesita tomar una posición que noes ni cómoda ni conveniente ni popular... sin embargo se necesita tomarla porque es justa".Dadoue, como Martir Luther King, ha llevado hasta las últimas consecuencias su elección de tomar esa posición, soportando el peso de ser coerente y testigo de principios de luz en un mundo que exalta las tinieblas del sueño de la mente y del corazón.

Dadoue es uno de los astro que nos repite esa lección de vida, invitándonos a asumir la responsabilidad que individualmente tenemos hacia los demás y hacia el mundo. No podemos quedarnos con los brazos cruzados justificando que no podemos hacer nada para solucionar problemas que son tan grandes... De esta forma nos haríamos cómplices de este estado de cosas. Hasta que Dios quiera, tenemos la posibilidad y responsabilidad de prestar nuestra obra para ponernos a servicio de los más necesitados, educándolos y educándonos a ser personas libres.